¡Ánimo! ¡Esta vez podemos triunfar!
Caracas, 18 de septiembre.- Por primera vez en ocho años, una serie de factores se combinan para propinar una derrota contundente a Hugo Chávez y evitar que se apruebe la reforma constitucional.
En primer lugar, el país entero se opone a la reforma, porque le permite a Chávez reelegirse perennemente, controlar todos los poderes públicos y establecer un régimen comunista con rango constitucional. El rechazo existe incluso dentro de las filas del chavismo, como se evidencia en las declaraciones de los dirigentes de Podemos, Partido Comunista y PPT; así como en la fractura entre el MVR y el PSUV.
En segundo lugar, existe un enorme descontento social, porque –a pesar de los multibillonarios ingresos petroleros– las necesidades básicas del pueblo venezolano siguen sin resolverse; mientras que el Régimen regala nuestro dinero a sus aliados extranjeros. El pueblo se desilusionó de Chávez y no quiere darle otro cheque en blanco.
En tercer lugar, la imagen de Chávez en el exterior se desplomó. En la prensa extranjera, cada vez aparecen más editoriales, artículos y declaraciones en su contra, tildándolo de dictador totalitario. Las estrechas relaciones que mantiene con Cuba, Irán y las FARC lo han convertido en un peligro para la seguridad hemisférica. Sólo le queda el respaldo de quienes reciben maletines, como Evo Morales, Daniel Ortega y Néstor Kirchner.
En cuarto lugar, luego de haber recorrido todos los caminos electorales, los venezolanos ya no creen en el CNE. No caerán de nuevo en la trampa de legitimar al Régimen, participando en elecciones amañadas. Además, la falsa oposición –ésa que incita a votar, a pesar de las evidencias de fraude– está débil y desprestigiada; ya no tiene el poder para frenar la desobediencia civil, ni siquiera con el acceso a los medios de comunicación.
En conclusión, el país está maduro y dispuesto para activar los Artículos 333 y 350, a fin de impedir la realización del referéndum.
La asociación Fuerza Solidaria propone llevar a cabo una protesta simultánea y generalizada. Es decir, miles de focos de protesta en la calle, repartidos en todos los municipios de Venezuela, el mismo día y a la misma hora, sin duración determinada, antes del 2 de diciembre.
Se trata de una acción pacífica, democrática y constitucional, pero de una enorme efectividad, como se ha demostrado en Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador y Perú. Es una forma de protesta segura, porque colapsa la capacidad de represión del Régimen.
Sin embargo, para alcanzar el éxito, hace falta el concurso de todos los sectores que desean vivir en democracia y la participación entusiasta de todos los venezolanos de buena voluntad.
Querido compatriota. No esperes más. Asume tu propio liderazgo y comienza a organizar la protesta en la zona donde vives. En futuros artículos, declaraciones y foros, se darán más elementos sobre cómo llevar a cabo estas acciones.
¡Ánimo! ¡Ten esperanza! ¡Esta vez, el triunfo está a nuestro alcance!
Alejandro Peña Esclusa
Presidente de Fuerza Solidaria
(www.fuerzasolidaria.org)