«La reserva es una herramienta para sustituir a la Fuerza Armada»
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Versión Final – Venezuela – 20 de julio de 2007
Alejandro Peña Esclusa, presidente del movimiento Fuerza Solidaria, analiza el mundo militar
Analista, dirigente, economista y experto en seguridad y defensa. Alejandro Peña Esclusa viene trabajando desde hace tiempo en un proyecto de reconstrucción del país, siempre con la premisa de un cambio de Gobierno.
Para él, la integración de los pueblos de América Latina si es posible, pero no por el camino que propone Hugo Chávez. A su juicio, la Fuerza Armada Nacional (FAN) está al servicio de un proyecto particular y ha perdido la institucionalidad. En entrevista con Versión Final, se enfocó en el tema militar, presagiando una enorme crisis interna.
—Dirigentes oficialistas aseguran que con este Gobierno la Fuerza Armada Nacional ha evolucionado ¿Le parece?
—No, la FAN ha involucionado, porque ha perdido su condición profesional para convertirse en una guardia pretoriana. A la FAN hay que reconstruirla totalmente, eliminando la subordinación a un proyecto particular, de corte socialista, y retornando a su condición profesional que está clara en la Constitución, es decir, la Fuerza Armada Nacional no puede estar al servicio de una parcialidad política.
—¿Puede llegar a ser la FAN socialista como lo pretende Chávez?
—No, la FAN debe siempre ser institucional. El socialismo del siglo XXI es una gran contradicción y es anti natura, porque la Fuerza Armada, particularmente la venezolana, tiene una trayectoria por razones históricas que combate al socialismo.
—¿El fortalecimiento de la reserva parece inminente con la designación de Rangel Briceño?
—Eso es lo que espera este Gobierno, pero en realidad no lo va a lograr, porque la reserva es una herramienta para combatir la Fuerza Armada y sustituirla. Sin embargo, no lo van a lograr.
—¿Qué pronóstico hace en torno del destino de la Fuerza Armada?
—Va a presentar una enorme crisis interna, porque se está forzando un proyecto antinatura dentro de la institución, que tarde o temprano reaccionará contra eso.
—¿Qué puede desencadenar esto?
—Un conflicto sumamente grave, porque una crisis dentro de la Fuerza Armada es un asunto sumamente delicado.
—¿Está Venezuela preparada?
—Yo creo no, porque nadie se imaginó que el Gobierno iba a politizar la Fuerza Armada y llevarla a un conflicto como lo está haciendo, eso es lo peor que se puede hacer.
—¿Cuál modelo de FAN se imagina con el lema Patria, socialismo o muerte?
—Cuando se utiliza ese lema se está parcializando la Fuerza Armada y llevándola a un proyecto particular, que además es contrario a la identidad nacional.
—¿Piensa que hay descontento dentro de la FAN?
—Hay un gran descontento. Pretenden llevar a la FAN a perder su razón de ser, su institucionalidad y su imparcialidad, además de su trayectoria histórico, para convertirla en una cosa totalmente diferente a lo que siempre ha sido.
—¿Promueve la posibilidad de un golpe de Estado?
—Aquí lo que va haber es una enorme reacción de desobediencia civil, que ya se nota y va haber una crisis militar como consecuencia de eso.
—¿Qué tan vivo está el conflicto entre la izquierda y la derecha en América Latina?
—Más que nunca, puede llegar a niveles nunca antes vistos, porque el continente está polarizado en dos bandos, en buena medida por las relaciones internacionales que lleva adelante el presidente Chávez.
—¿Entonces, sigue siendo Chávez un líder en el continente?
—Yo diría que es un anti líder, que nos está llevando a un conflicto en la región latinoamericana. Los venezolanos vamos a tener que reconstruir las relaciones tradicionales que teníamos y mejorarlas, por supuesto, porque hay un enorme descontento con la situación actual, por la intervención de Venezuela en los asuntos internos de otras naciones.
—¿Por qué la izquierda no es una alternativa?
—Porque en lugar de resolver los problemas económicos y sociales de la región, los empeora y encima añaden un elemento, que no existía antes, que es la polarización. Nosotros proponemos un camino diferente en nuestro libro El continente de la esperanza, en el que hay una propuesta de desarrollo que integra temas aparentemente inconexos , como la historia, la economía, la creatividad, la identidad y la moral.
ANÁLISIS
“Vamos hacia una crisis más explosiva que la colombiana”
—¿Pudiera darse en Venezuela una crisis como la colombiana?
—No, la crisis colombiana es lenta, de largo plazo, aquí vamos hacia una crisis de mayor magnitud, pero más explosiva.
—Esto de explosiva, quiere decir más violenta…
—Depende, no podría creer que fuese así. Lo que sí sé es que hay proceso de imposición de un modelo contrario a la identidad nacional, de una manera rápida, inconveniente, que puede provocar una reacción generalizada en todo el país. Hasta ahora ha sido pacífica, pero no podemos asegurar que continúe así, porque el régimen intenta, a toda costa, continuar con su proyecto.
—¿Cómo avizora el panorama político?
—Después de la crisis que se avecina, va a venir una reconstrucción del país, donde se solucionarán las injusticias de lo que el Gobierno llama la cuarta república y también se limitarán los errores gravísimos de la quinta. Yo creo que vamos hacia una nueva etapa en la que Venezuela va a encontrar su verdadero rumbo, su rumbo histórico, el rol que siempre había tenido en América Latina y en el mundo, porque anterior a este Gobierno habían demasiadas injusticias sociales, a pesar de la bonanza económica, no se resolvieron los problemas de pobreza, pero con este Gobierno la situación ha empeorado, pero encima se ha polarizado, aunque ha servido para generar una conciencia de la necesidad de encontrar una reconciliación y un proyecto de desarrollo nacional.
—El Gobierno aplicó un paquete de medidas, ¿qué le parece?
—Ninguna de las medidas que se han tomado últimamente funciona cuando se ataca la propiedad privada y entonces no hay inversión, por muy alto que esté el precio del petróleo y aunque se rebajen los impuestos, si los empresarios desconfía del Gobierno y las instituciones entonces no invierte, por lo que hay dinero, pero no hay producción. Este Gobierno, a pesar de haber tenido el triple de los ingresos que los anteriores, no ha podido ni aumentar el empleo, ni bajar la pobreza, justamente por su lucha contra el empresariado nacional.
—¿Cómo hacer entonces para que esto mejore?
—Definitivamente tiene que haber un cambio de Gobierno y un proyecto de desarrollo que tenga, primero, estabilidad política y luego un planteamiento basado en la promoción de la empresa privada y de las grandes obras de infraestructura, el desarrollo científico y tecnológico.
POLÉMICA MERCOSUR
Hace dos semanas Alejandro Peña Esclusa solicitó formalmente al Congreso de Brasil postergar la incorporación de Venezuela al Mercosur, advirtiendo que el presidente Chávez utilizará los acuerdos económicos como plataforma para exportar su modelo castro-comunista a toda la región.
“No es casual que varios embajadores y cónsules venezolanos hayan sido amonestados y obligados a retirarse por apoyar a grupos radicales en otras naciones y que, en años recientes, Venezuela sea el país latinoamericano con más acusaciones en la OEA por injerencia indebida”.
Peña Esclusa también advirtió a los brasileños que, de incorporar a Venezuela, “Chávez abrirá las puertas del Mercosur a gobiernos forajidos y al fundamentalismo islámico” y aseguró que “la actuación de las FARC y el Hezbollah se expandirá por los países del Mercosur”.
Esa misma semana el presidente Chávez amenazó con retirarse del Mercosur si los Congresos de Brasil y Paraguay no ratifican la entrada de Venezuela en el bloque en los próximos tres meses. Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay habían admitido a Venezuela en el Mercosur el año pasado, pero el tratado necesita ser ratificado por todos los Congresos de los países miembros.
“No estamos desesperados por entrar a un viejo Mercosur que no quiera cambiar”, dijo Chávez, añadiendo que el bloque comercial de Sudamérica está “signado por el capitalismo y la competencia feroz”.
En una creciente guerra de palabras con Brasil, Chávez había acusado anteriormente a los legisladores brasileños de ser “loros” de EE UU por no ratificar la entrada de Venezuela en el Mercosur.
Desde 1998, Peña Esclusa ha venido realizando una intensa labor en América Latina, explicando los peligros que significa la expansión del proyecto chavista en la región. Ha visitado Argentina en cinco oportunidades, Brasil seis veces, Bolivia dos veces, Colombia tres, El Salvador tres y Uruguay dos veces. Paralelamente, ha escrito numerosas cartas y artículos, explicando cómo Chávez ha destruido la democracia y recomendando a otros países no importar el modelo.